Multilayer Packaging Recovery
Foco en la rentabilidad de planta a través de la valorización del aluminio, un elemento cotizado en el mercado para su posterior aprovechamiento energético.
El aluminio es uno de los elementos más frecuentes pero menos visibles en un gran número de envases. Es también uno de los más complicados de extraer. Reciclar aluminio es, hoy por hoy, uno de los grandes retos en el tratamiento de los residuos para alcanzar una máxima valorización y, en consecuencia, cerrar el ciclo. Es un reto por su complejidad pero una gran oportunidad por su alta rentabilidad.
Bianna ha desarrollado una tecnología capaz de separar toda la materia asociada al aluminio en las presentaciones comerciales (tetrapack, blisters, etc.) y su craqueo para su posterior aprovechamiento energético. El proceso, integrado en los sistemas ThermoValue Solutions, se basa en un sistema pirolítico de combustión a baja temperatura y con ausencia controlada de oxígeno seguida de una postcombustión a 1.300 grados.
Una línea de tratamiento MPR se traduce en una alta rentabilidad: el valor económico del aluminio en los mercados internacionales continua con la senda de escalada, esta es una de las justificaciones para este tipo de sistemas.
Se trata de un proceso integrado en la economía circular: la administración pública ha realizado una apuesta fundamental por la inclusión de procesos de valorización económica de residuos.
Ventajas
Este sistema extrae una materia prima con alta calidad que permite su reintroducción directa en los procesos productivos. Sus mayores ventajas son:
- Equipos compactos con alto nivel de modularidad
- Espacio limitado para la implantación de la línea
- Bajo nivel de mantenimiento de la línea en la mayoría de sus componentes.
- El excedente de energía térmica generada se puede aprovechar de forma directa en otros procesos como son secados/deshidrataciones, generación de agua caliente y otros.